La Mezquita de Rüstem Paşa (Rüstem Paşa Camii, en turco) es uno de los templos más célebres de Estambul. Curiosamente, su fama contrasta con el número relativamente modesto de turistas que la visitan, y todo ello a pesar de estar situada en una zona muy transitada, a escasos metros del popular Bazar de las Especias.

¿Por qué esta mezquita es tan famosa y, al mismo tiempo, tan desconocida?
La respuesta radica en una combinación de factores históricos, artísticos y arquitectónicos que hacen única a esta mezquita otomana.
En primer lugar, la mezquita fue auspiciada por Rüstem Paşa, gran visir y esposo de Mihrimah, la hija del sultán Suleimán y de Hürrem. Rüstem Paşa no fue un visir cualquiera, así su figura está rodeada de intrigas palaciegas y conspiraciones que influyeron decisivamente en la sucesión dinástica del Imperio Otomano. Su alianza con Hürrem y su habilidad política marcaron un capítulo crucial en la historia del imperio.

Por otro lado, la mezquita debe gran parte de su prestigio a haber sido diseñada por Sinan, el arquitecto más destacado de la historia otomana. Sinan es reconocido por su capacidad para integrar la arquitectura funcional con la belleza artística, y su legado incluye obras de gran calado como la Mezquita de Suleimán o mismo la dedicada a Mihrimah.
Sin embargo, lo que realmente distingue a esta mezquita es el uso excepcional de los azulejos de Iznik, famosos por sus colores vivos y sus intrincados diseños florales y geométricos. A diferencia de otros templos como la famosa Mezquita Azul, donde los azulejos están colocados en zonas altas o de difícil acceso visual, en Rüstem Paşa se pueden apreciar en todo su esplendor y detalle.

La mezquita se encuentra elevada sobre una terraza que domina parte del centro de Eminönü; en los bajos de esta terraza se sitúan numerosos locales comerciales que ayudan a sostener económicamente el templo, pero que al mismo tiempo ocultan su acceso principal, siendo este el principal motivo por el que es desconocida para una parte de los turistas.
La construcción de la Mezquita
En el siglo XVI, muchas de las grandes figuras otomanas promovían complejos religiosos que sirviersen de lugar de enterramiento y culto a su figura tras su muerte; Rüstem Paşa no iba a ser menos y de mano de Sinan, organizó la construcción del templo, unos años antes de su fallecimiento.

Las motivaciones de Rüstem Paşa, para promover esta mezquita, se creen que fueron, en parte, un intento de redimirse de la mala imagen que había generado en la opinión pública otomana sus famosas conspiraciones. Hay que tener en cuenta que se le atribuye indirectamente la caída y ejecución del príncipe Mustafa, heredero al trono, así como la destitución de Pargalı Ibrahim Paşa, amigo cercano del sultán y figura clave en la administración otomana.
Una tumba que nunca llegó
A pesar de que la mezquita lleva el nombre de Rüstem Paşa, su cuerpo no descansa allí. En su momento se especuló que el complejo serviría también como su lugar de enterramiento, pero, llegado el momento de la muerte del gran visir en 1561, la obra aún no estaba terminada y por ello el sultán Suleimán decidió que lo más adecuado era que fuera enterrado en la Mezquita de Şehzade, lugar que sirve como panteón para importantes figuras del imperio.

Un templo singular en el corazón comercial de Estambul
La mezquita sería finalmente completada en el año 1563, y con el tiempo se consolidaría como una de las obras más bellas e influyentes del Estambul otomano.
Su único alminar destaca entre el conglomerado de tiendas y bazares de Eminönü y es el principal referente visual para aquellos que busquen este tesoro artístico, que ofrece una experiencia íntima y menos masificada en comparación con otros monumentos de Estambul.
Visitarla es como recibir un premio inesperado: un universo de azulejos en plena sinfonía de colores, luz y geometría. Pero también es una excusa perfecta para redescubrir la figura de Rüstem Paşa, uno de los personajes más influyentes —y discutidos— del siglo de oro otomano, cuya mezquita sigue recordando su poder y riqueza.

Actualizado el 13 junio,2025.
Publicado por Miguel Ángel Otero Soliño


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